miércoles, 29 de noviembre de 2017

¿Cómo empezar a despedir las vacaciones sin caer en depresión?

Entre las principales recomendaciones de Montserrat Sepúlveda están:
• Conversar con los niños sobre la importancia del regreso al colegio y ver qué se espera de este año y cómo piensan lograrlo.
• Plantear el regreso a clases como algo positivo y muy importante.
• Escuchar sus temores, dudas, intereses y expectativas con mucha atención y orientarlas respetuosamente en todo momento.
• Establecer y respetar los horarios para levantarse, dormir, alimentarse, tomar clases especiales, hacer tareas y jugar o entretenerse.
• Responsabilizar a los niños sobre el cuidado de sus útiles escolares, el arreglo diario de sus uniformes o ropa escolar, así como de la solución de sus tareas escolares para evitar el desorden, que es causante muchos problemas y tensiones familiares.
• Supervisar bien su desayuno, que es el principal alimento y que les permitirá concentrarse y aprender bien durante toda la mañana.
• Estar pendiente de todos los cambios de conducta o actitud de los niños, que puedan ser manifestaciones de algún problema no resuelto en la escuela, o en su vida personal. Debemos tener en cuenta que los problemas para ellos son tan grandes e importantes como lo son los nuestros.
• Salir a tiempo de casa para evitar el tráfico y llegar tarde, e intentar mostrarse alegres en todo momento para que inicien bien su jornada.
El cómo nuestros niños ingresen a clases depende mucho de cómo nosotros los preparemos para ello. "Si nosotros nos vemos contentos y motivados con esta nueva etapa que ellos comienzan, seguro que para los niños será más fácil de enfrentar", asegura Sepúlveda. Contarles sobre nuestras experiencias positivas y darles a entender que los nervios, por ejemplo, son "normales", será mucho más tranquilizador para ellos.
"Nunca debemos olvidar que los niños son como esponjitas que absorben todo lo que escuchan y ven. Es por este motivo que es fundamental ser modelos adecuados para ellos, si nos ven como personas positivas y alegres, lo más probable que su mirada frente a la vida también lo sea", indica la especialista.
Motivarlos a pequeños hábitos diarios – durante las vacaciones – como leer un libro entretenido, ver una película que le deje una enseñanza o informarse y profundizar sobre su ramo favorito, son elementos importantes que les ayudarán a mantener una "continuidad" y así evitar la total desconexión de las materias y actividades propias del colegio.



NO OLVIDES QUE…
-Comprar uniformes y útiles con anticipación ayudará a evitar tensión dentro del hogar y mayor ansiedad por el regreso a clases.
-Los primeros días suelen ser decisivos para el desempeño escolar de los niños durante todo el año.
-Si enseñamos a los niños desde pequeños hábitos de orden, limpieza y estudio probablemente la etapa escolar -y su vida en general – será más fácil.

Las metas comunes: una manera de ayudar a las niñas y niños a que alcancen sus metas y sus sueños

El vínculo que existe entre las familias y las instituciones educativas es una herramienta que nos permite crear entornos protectores en los que niñas, niños y adolescentes pueden tener un adecuado desarrollo físico, cognitivo, social y emocional. Existen muchas maneras de construir este vínculo. Una de las más importantes son las metas comunes. A continuación les presentamos algunas ideas importantes, para que juntos, aprendamos a trazar metas comunes.

¿Qué son las metas comunes? 
Son objetivos que padres, madres, cuidadores, estudiantes e instituciones se trazan como comunidad para que juntos puedan alcanzar sus metas y sueños. Representan los intereses, metas y logros que quieren alcanzar como comunidad educativa.

¿Por qué son importantes las metas comunes?
Las metas guían la relación entre la familia y el colegio y les permiten a todos los miembros de la comunidad educativa llegar a acuerdos y enfocar sus esfuerzos, acciones y experiencia para alcanzarlas. Así mismo, las metas comunes les permiten crear espacios de conversación positivos en los que se comparten proyectos y sueños conjuntos y no solo se habla de problemas, críticas o quejas.


¿Cómo se construye una meta común?
1. Las metas comunes se construyen en equipo. Para establecer una meta, todos los miembros de la comunidad deben comprender cuáles son las necesidades e intereses de cada uno, deben hacer partícipes de la decisión a todos (incluyendo a los estudiantes) y buscar estrategias para desarrollarlas en espacios como las asambleas, los consejos o comités.
2. No es necesario partir de cero.  La información que tenemos de fuentes como la matrícula, las asambleas de padres, los casos que a diario atendemos, el Proyecto Educativo Institucional o la evaluación institucional, nos dan ideas muy claras de cuáles son nuestros retos, intereses y necesidades como comunidad educativa. De ahí podemos partir para proponer las metas comunes.
3. Las metas son claras y sencillas. Para que la comunidad educativa pueda alcanzar sus metas estas deben estar definidas como objetivos que se puedan alcanzar y que se puedan monitorear. Esto nos permite saber si estamos avanzando en su cumplimiento y si es necesario hacer ajustes. Algunos ejemplos de metas pueden ser: Prevenir el embarazo adolescente, prevenir el consumo de sustancias psicoactivas o mejorar el acompañamiento al uso de la tecnología que hacen las familias.